lunes, agosto 17, 2009

¡Dios promete y no cumple!

"Hasta cuando Señor, seguirás con eso de que "me bendecirás" y todo, pero no haces nada por cambiar mi triste realidad presente?..."

La frase anterior brota del corazón de muchos de nosotros en momentos duros de la vida. Por ello, te invito a seguirme en esta breve reflexión:
A Abram Dios le habló fuerte y claro en Génesis 15, y comparó Su bendición con las estrellas del cielo. Luego, cada vez que Abram mirara al cielo recordaría que la compañía de Dios sigue allí. Pero…

…¿qué pasaría si (locamente hablando) el cielo se nublara por varios meses?

Probablemente en un principio, Abraham tendría claro que las estrellas siguen allí, pero al pasar del tiempo y al sobrevenir los ajetreos cotidianos dejaría de lado la idea de “mirar las estrellas”. Obvio, si no se pueden ver…

Y mientras más sumido en “su vida”, menos recordaría “Su promesa”… y, en aquellos momentos en donde frecuentaba mirar al cielo y recibir aliento divino para seguir avanzando, ahora solo encontraría un triste cuadro gris…
…quizás, no lo sé... quizás hasta llegaría a dudar de si alguna vez estuvieron allí esos puntitos brillantes o solo soñó que había algo más allá de aquellas nubes...

Mira no soy pitoniso, pero ya sé lo que están pensando: "ya está dando jugo el Guille! ¿cómo se le ocurre que a alguien se le va a olvidar que hay estrellas detrás de las nubes?

Bueno, te reto a hablar con cualquiera que haya atravesado por tiempos de angustia prolongados en su vida, y verás que es MUY FRECUENTE olvidarse de las estrellas que Dios nos señaló un día… muchos incluso llegan a pensar que Dios es un mentiroso, o que ellos mismos no tienen la firmeza interior como para seguir soportando tanto problema que le rodea… yo mismo he llorado en más de una oportunidad por sentirme así…

…¿saben qué es lo loco de todo esto? Que las estrellas siguen allí, y no se han movido de su sitio… jamás se apartaron!!! pero, como hace tiempo no las podemos ver, caemos en dudas tontas que nos terminan afligiendo el corazón y amargándonos la vida.

Hoy quiero invitarte, si estás en un período nublado de tu vida por no poder ver aquellas estrellas que Dios un día te mostró (te estresa no ver respuestas, o no sientes Su compañía, o no sientes que Él está en control, o simplemente no tienes control de lo que sientes...) solo recuerda esta gran verdad: las estrellas siguen en su mismo lugar!... en otras palabras:

…Dios sigue estando a tu lado
…Dios sigue en control de tu vida
…Dios sigue en control de tus circunstancias

…y Dios disipará esas nubes del cielo sólo cuando aprendas a ver las estrellas a través de ellas.

¡No dejes que un tiempo nublado arruine la visión de tu cielo estrellado!

DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

PD: Dedicado a James, por tus conflictos estudiantiles amigo, y a Menares, por los familiares... y a todos quienes lean esto y reciban un respiro de Dios.

sábado, agosto 15, 2009

No Me Mueve

Este es un poema de autoría católica, pero me encantó. A veces se hace de lenta lectura debido al lenguaje que emplea, pero una vez que se analiza se transforma en el anhelo personal de muchos de nosotros. Aquí va:

No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.

Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.

Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.

No me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.

DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

viernes, agosto 07, 2009

le tengo miedo al Matrimonio

Si, “le temo al matrimonio…” es probablemente el sentimiento acallado en el corazón de muchos de nosotros hoy, lo queramos reconocer o no. Pero, ¿por qué ese miedo intrínseco a dar un paso tan importante?

Para no latear voy a decir derechamente algunas de las razones que hasta ahora he recopilado:

1) No estamos dispuestos a renunciar al “placer”. Una vez que nos acostumbramos a salir “con una, y con otra, y con otra…” nos cuesta creer que haya “gente marciana” capaz de quedarse con una sola pareja… si hay tantas más en el mundo!

2) No creemos que las parejas en matrimonio puedan ser fieles el uno con el otro. Vamos, la tentación es grande… si hasta le hemos puesto “aventura” en vez de llamarlo como se debe: Engaño, Infidelidad. ¿O acaso los altos puntos de raiting que tiene la serie “infieles” se deben a que los productores falsearon los datos? NO!!! Se deben a una cultura que cría y mal cría la idea de que la fidelidad es un concepto arcaico.

3) Si casarse significa “legalizar el sexo que YA TENGO con mi pareja”, entonces no me interesa pasar por “ese mero trámite…”

4) “No puedo casarme porque… ¿y qué pasa si en 10 años ya no amo a mi esposa?” como si el amor fuera un sentimiento efímero que viene y se va…

…a estas alturas ya no puedo seguir. Me hierve la sangre, me arde un fuego interior por gritarle al mundo ¡hey, las cosas no son así!, ¡las cosas no tienen que ser así!

Pero no seguiré escribiendo por ahora… porque creo que el mejor ejemplo y el más fuerte grito que se puede lanzar en este tema surge de la “adoración anónima” de todos aquellos que, con setenta primaveras en el cuerpo y una cálida mirada hacia el pasado, todavía sostienen de la mano a aquella persona con la que hace mucho tiempo atrás se puso un anillo de compromiso… directo en el corazón.

Si mi Señor no viene antes, espero pintar con mi propia vida el cuadro que previamente acabo de describir. Quiero mirar a mis amigos a los ojos y decirles “yes, we can!”…

…porque el hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido... y eso incluye la vida matrimonial.

DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

PD: En honor a la postura de argollas de Jaime y Noemí, felicidades!!!!!