domingo, mayo 27, 2007

Habitando en Dios

Salmo 91: “El que habita al abrigo del Altísimo, se acoge a la sombra del Todopoderoso”

Que gran declaración la que realiza el salmista en estos versos. Inicia hablando de una relación con Dios que va más allá de unas simples oraciones; habla de habitar en su presencia, de vivir en Él cada momento posible, de buscarlo con pasión y entrega.

Sin embargo, de inmediato menciona la respuesta que tiene Dios frente a esta actitud con la que nos presentamos delante de Él, y es acogernos bajo su cuidado, protección y fortalecimiento.

Esto queda expresado en la traducción de la palabra “Todopoderoso”, que viene del hebreo “El Shaddai”, y que significa el Todosuficiente. Pero también tiene que ver con la raíz “Shad”, que hace alusión a “los pechos de una mujer que da de mamar”, y refleja un anhelo del corazón de nuestro amado Señor: Criarnos, Enseñarnos y Fortalecernos con Su alimento… Su Palabra.

Es una invitación a acercarnos al único que puede transformar nuestras vidas, porque Él es el Shaddai, el Todopoderoso. Pero no con los tradicionalismos ni palabras repetidas que acostumbramos, sino con la actitud que describiera Jesús en Mateo 6:6, dedicándonos de lleno a estar con Él, a “habitar bajo la sombra del Omnipotente”.

Y no solo es una invitación, sino que retomo el término anterior, resaltando que es un ANHELO DEL CORAZÓN MISMO DE DIOS que sus hijos se acerquen a Él, y cada vez más.

Dios te ha hablado. Esto es una creación en tu corazón, y surge por el poder de Dios, y tiene como objetivo que te acerques más a Él.

Si estás dolido, ve como enfermo al doctor. Si te sientes que estás bien así como estás, reconoce que con cada latido de su corazón Dios quiere que te acerques aún más a Él.

Él te ama, y te está esperando.

Antes de dejar tu comentario detén tu vida, y acércate a Él con una actitud diferente. Con pasión y anhelo, y disposición a escuchar y recibir, porque Él es el Shaddai que te sustentará.

DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

“Jehová-lallevá”